Search This Blog

Wednesday 13 July 2011

Los deportes en mi vida


Desde niño siempre tuve un marcado interés por el deporte y las estadísticas, no fui ni soy un gran deportista, como todos los niños fui al  tae kwon do o más bien Moo Duk Kwan después jugué futbol y basquetbol y siendo adulto jugué futbol dos años como pasatiempo y por simple diversión, pero eso si siempre fui un gran aficionado a los deportes y en particular a las estadísticas.
De los primeros recuerdos que tengo en la infancia están los partidos en la tele viendo en CU a Cabinho y Hugo marcando goles, el Mundial de España 82 y la patada de Schumacher a Battiston y el sentimiento de injusticia de no ver a Francia que era el que mejor futbol ofrecía ganar la copa y en cambio ver a los aburridos Italianos ultra defensivos pero ultra efectivos con un Paolo Rossi atinadísimo convertirse en campeones del mundo, recuerdo también la primera serie mundial que vi en la tele Yankees vs Dodgers y el toro Valenzuela orgullo Nacional  demostrando que se puede triunfar en las mayores ayudando a la remontada de los Dodgers para coronarse campeones , aquellos Celtics vs Lakers y la « magia » de Jhonson contra los tiros de tres de Bird, los 1eros de Enero viendo todos los tazones colegiales posibles ademas del desfile de las Rosas, y claro el partido que me hizo fan de los niners con « la atrapada » de Dwight Clark a pase de Joe Montana para ganarle a Dallas en Final de Conferencia Nacional y llegar al Super Bowl para ganarlo por primera vez contra los Bengalies de Cincinnati, a veces me sorprende tenerlo todo tan presente y recordarlo más que otras cosas como mis cumpleaños, las tardes de Sábado en los boy scouts o mis vacaciones de Verano…

Y el momento decisivo llegó  después de haber recibido como regalo una enciclopedia de las Copas Mundiales en pleno Mundial 86 ahí nació en mi una obsesión por los números y las estadísticas, me aprendí de memoria la historia de todos los mundiales, con los participantes, nombres de jugadores y marcadores en finales, ya no llegó  a esos niveles pero sigo de vez en cuando probando mi memoria y agregando cada copa del mundo a mi almanaque mental de estadísticas mundialistas.
Y así seguí interesándome por el futbol Mexicano, la injusticia de las liguillas, las broncas espectaculares entre Chivas y América, la decepción de perder una final contra el América en tres partidos después de aquella nefasta actuación del árbitro Urrea en la Corregidora de Querétaro o en el Azteca para después vivir el mejor momento con aquel gol del Tuca que vengó  esas derrotas y después el descubrimiento del futbol Italiano en la época en la que Maradona hacia maravillas con el modesto Napoles y Platini lo ganaba todo con la Juventus, el torneo Espanol gracias a Hugo Sanchez y sus años en el Atletico y sobre todo en el Real Madrid  hicieron  que me interesara por los torneos Europeos, las Copas Europeas y sobre todo las estadísticas y la historia.

Después está el tenis, los torneos de Grand Slam, la Formula 1, los veranos de juegos Olímpicos, sobre todo mi primer recuerdo en Los Angeles 84 con las medallas de oro en caminata de Ernesto Canto 20 en kms y de Raul Gonzalez en 50Kms… 
El tiempo paso y segui viendo y leyendo sobre todos los deportes, me toco venir a vivir y trabajar en Europa, asistir a estadios de futbol en Francia, Inglaterra y Espana, descubrir deportes nuevos como el Rugby, el Cricket o el rallye formato WRC.

Y llegamos a la era actual y gracias a Internet y a la democratización de la información, ahora podemos leer los diarios deportivos de todo el mundo, tenemos acceso a todos los partidos de cualquier liga y disciplina, tenemos entrevistas,  enciclopedias en línea y todo al alcance de la mano, nunca había sido tan fácil estar al tanto de lo que pasa en nuestro deporte favorito.

Y aquí llego a una reflexión casi veinte años después de haber escogido una carrera universitaria y haberme ido por el camino mas fácil y menos riesgoso de estudiar una carrera relacionada con las computadoras porque era una carrera con futuro y  trabajo casi seguro y me pregunto qué hubiera pasado si habría  seguido uno de mis sueños de niño de convertirme en periodista deportivo.

Quien sabe que habría pasado